Esta es la época del año propia del Arcángel Gabriel. Pronto pasaremos a estar bajo la influencia benefactora de Rafael. Antes de realizar esa transición que marca la llegada de la Primavera y el elemento Aire, Gabriel nos deja un importante mensaje sobre el equilibrio… Gabriel, guardián de las aguas interiores y exteriores sabe mucho del equilibrio necesario que ese elemento necesita gozar para que la Naturaleza se mantenga en armonía.
Importante mensaje que nos llega del Arcángel Gabriel y que nos invita a reflexionar sobre nuestra capacidad de DAR, para mantener el flujo del intercambio con todo lo que nos rodea. incluso el intercambio entre reinos, entre seres vivos.
El ser humano está tan acostumbrado al «dame, dame, dame» que apenas si es agradecido. Nos hemos creído tan tan superiores a todo que hemos olvidado nuestra posición en el tapiz de la Vida. No sabiendo dónde nos colocamos caemos presas de la arrogancia, el especialismo… rompemos la conexión sagrada con los reinos de abajo y de arriba y olvidamos cual es nuestra posición como mediadores de reinos. Un buen mediador sabe dar y recibir. Si solo se mantiene pidiendo desde la mezquindad y el egoísmo, sin dar a cambio, rompe la cadena armoniosa que une a todos los seres vivos. Entonces llega la sequía, la desolación, el abandono, la sequedad tanto física como interna, tanto mental como emocional y espiritual. Entonces nos quejamos y miramos hacia arriba con aires y ademanes aún más exigentes, pensando que es «arriba» lo que falla y quien ha roto la alianza, cuando somos nosotros mismos, en nuestro egoísmo tomador, quienes rompimos los lazos sagrados que nos unen a todo y a todos.
Entreguemos más, demos más, agradezcamos más, restablezcamos el flujo sanador del Dar y el Recibir sabiendo que el desequilibrio principal en estos momentos se encuentra en nuestro «dar» o falta de él.
Bendiciones
